La junta de Codere aprueba la reestructuración y los Martínez Sampedro darán batalla legal
Los fondos suman una mayoría "amplia" para dar luz verde
Los fundadores denuncian que es "ilegal" y que irán a la justicia
JAVIER G. ROPERO
MADRID
La junta de accionistas de Codere, convocada en sesión extraordinaria, aprobó la reestructuración anunciada por la compañía a finales de abril y que convertirá a sus principales acreedores, los bonistas, en propietarios del 95% de la matriz de nueva creación, alcanzando así el control total del grupo.
Los fondos que en la actualidad controlan la compañía de juego, encabezados por Silver Point, lograron una "amplia mayoría", según anunció Codere, para sacar adelante los acuerdos. Esta ya desveló que un 60% del capital respaldaba la reestructuración, porcentaje que se alcanza sumando las participaciones de los fondos Silver Point (23,2%),
M&G (21%), Abrams (8,7%) y Contrarian (7,2 %).
Estos, y el resto de accionistas, pasarán a ostentar apenas el 5% de la nueva matriz, si es que para entonces permanecen en la compañía. Un de ellos, el fondo Alden Global, ya se ha marchado: según los registros de la CNMV, este poseía un 4,7% del capital hasta el 10 de mayo, día en el que su participación desapareció tras venderla en el mercado. Los accionistas podrán quedarse en la nueva Codere, recibiendo unos warrants para participar de una futura venta del grupo; o vender su participación a un precio fijado a la disolución de la actual matriz, Codere SA.
Además del vuelco en el control de Codere, el acuerdo contempla la emisión de unos bonos por 100 millones para pagar gastos inmediatos y los cupones de la deuda de marzo y abril que han sido aplazados. A estos 100 millones se sumarán otros 125 cuando finalice el proceso, y se prolongan hasta 2026 y 2027 los vencimientos de las emisiones de 500 millones de euros y 300 millones de dólares que están en curso, y de las que los bonistas capitalizarán hasta 367 millones.
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Salón de apuestas de Codere. pablo monge
"Con este proceso Codere considera, en función de las estimaciones actuales, que se asegura la viabilidad de la compañía, gracias a la confianza de sus bonistas en las perspectivas del grupo, en su equipo gestor y en los más de 10.000 empleados que integran la organización", dice la compañía en una nota de prensa.
Pero los fundadores de la compañía, los hermanos Martínez Sampedro, prometen batalla judicial. El expresidente José Antonio Martínez Sampedro denunció en su exposición ante los accionistas las "prisas" de los fondos para aprobar el acuerdo "sin presentar a la
junta una valoración de Codere que sirva de referencia a tan drástica y perjudicial propuesta". La ausencia de un informe de valoración independiente, y que toda la documentación se haya proporcionado en inglés, "entraña ocultar información a los accionistas españoles", según su postura.
Los Martínez Sampedro confirmaron que tomarán medidas legales al considerar que el acuerdo aprobado es "ilegal", deslizando además que "se presenta en beneficio de unos pocos accionistas que aparentemente tienen interés común con los acreedores que se benefician" del mismo.